¿Cuáles son los deberes del inquilino de un piso de alquiler?

Medilloguem

21 feb. 2022

Cuando se firma un contrato de arrendamiento de una vivienda, se formaliza un acuerdo por el que el inquilino puede hacer uso de un inmueble durante un determinado período de tiempo a cambio de cierta cantidad de dinero. Ahora bien, este acto también tiene una serie de implicaciones legales, puesto que el inquilino de una vivienda, en el momento de firmar el contrato, se ve legalmente comprometido a seguir una serie de obligaciones. ¿Cuáles son los deberes que tiene el inquilino de un piso en alquiler?

 

1. Abonar la fianza

El inquilino tiene la obligación de entregar al propietario la fianza, un depósito que se abona al inicio del contrato y que tiene la función de servir como garantía al propietario de que la vivienda le será devuelta en buenas condiciones. El plazo que tiene el propietario para depositar la fianza en INCASOL es de dos meses a partir de la fecha de la firma. Para saber más sobre qué es y para qué sirve la fianza, lee este artículo.

 

2. Pagar la renda, los suministros y los gastos

Es un deber del inquilino pagar la renta mensual, durante los siete primeros días del mes, en el lugar y procedimiento que acuerden las partes y hasta el plazo marcado en el contrato. El incumplimiento deliberado de este punto puede ser motivo de resolución del contrato por parte del propietario. En este sentido, en caso de que el inquilino abandone la vivienda antes de que finalice el contrato, si está previsto en el contrato, tendrá que pagar una indemnización de un mes por año que reste del contrato.

También es obligación del inquilino estar al día del pago de suministros de agua, gas y electricidad. Del mismo modo, el inquilino debe hacerse cargo de los gastos de mantenimiento del inmueble (servicios, tributos, cargas y responsabilidades que correspondan a la vivienda alquilada), siempre que se haya pactado que sea él quien lo haga. 

 

3. Cuidar el inmueble

El inquilino de un piso debe cuidar el inmueble y dejarlo en las mismas condiciones en que estaba cuando empezó el contrato de alquiler. El inmueble, por tanto, debe estar destinado a lugar de vivienda: el inquilino no podrá hacer otro uso diferente al pactado con el propietario ni podrá llevar a cabo actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilegales. 

 

4. Reparar los daños fruto del uso o una negligencia

El inquilino de un piso debe hacerse cargo de reparar los posibles daños de la vivienda que surgen con el paso del tiempo de su estancia y el desgaste del uso ordinario, así como los daños debidos a su responsabilidad o negligencia. 

 

5. No subarrendar sin permiso

El inquilino de un inmueble no puede subarrendar la vivienda sin el consentimiento escrito del propietario, ni totalmente ni de forma parcial o por habitaciones.

 

6. Soportar las obras de mejora

Cuando deban producirse obras o reparaciones que sean necesarias para conservar la vivienda en condiciones de habitabilidad y que, por definición, corren a cargo del propietario, el inquilino está obligado a permitir la entrada del propietario o técnicos designados por él para verificar la necesidad de realizar estas reparaciones. El inquilino está también obligado a soportar estas obras de mejora, ya que redundarán en su beneficio. 

 

7. Acatar la finalización justificada del contrato

Si el propietario reclama la vivienda para su uso propio o de un familiar directo, el inquilino está en la obligación de acatar la finalización justificada del contrato de alquiler y debe dejar libre el piso. Esto puede darse siempre y cuando se avise con antelación, haya transcurrido un año de contrato, y bajo ciertos supuestos legales, como por ejemplo el divorcio del propietario, y si la finalidad de recuperar el inmueble es utilizarlo como residencia habitual para él o un familiar de primer grado (padres, madres, hijos) o para el cónyuge (si existe sentencia firme de divorcio o nulidad matrimonial). 

 

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